Reseña: Todo lo que nunca fuimos - Alice Kellen

                                                        

Título: Todo lo que nunca fuimos

Autor: Alice Kellen

Editorial: Planeta

Nº de páginas: 352

Leah está rota. Leah ya no pinta. Leah es un espejismo desde el accidente que se llevó a sus padres.
Axel es el mejor amigo de su hermano mayor y, cuando accede a acogerla en su casa durante unos meses, quiere ayudarla a encontrar y unir los pedazos de la chica llena de color que un día fue. Pero no sabe que ella siempre ha estado enamorada de él, a pesar de que sean casi familia, ni de que toda su vida está a punto de cambiar.
Porque ella está prohibida, pero le despierta la piel.
Porque es el mar, noches estrelladas y vinilos de los Beatles.
Porque a veces basta un «deja que ocurra» para tenerlo todo.

En esta historia conoceremos a Leah y Axel.

Leah es una chica de 19 años que tenía un sueño y era ir a la universidad y estudiar Bellas Artes, pero tras la muerte de sus padres en un accidente perdió totalmente la ilusión y la motivación. Por ello, su hermano Oliver se quedará con ella hasta que esté mejor, pero una oferta de trabajo que no puede rechazar le obliga a irse a Sidney dejando a su hermana al cuidado de Axel, su mejor amigo y del que Leah lleva enamorada en secreto desde hace años.

Leah y Axel empezarán a convivir juntos y a pesar de que al principio cada uno está encerrado en sí mismo, poco a poco empezarán a compartir momentos juntos y Axel tratará de ayudarla y a devolverle esa alegría y esa motivación que ha perdido.

Todo lo que nunca fuimos es un libro narrado en primera persona desde dos puntos de vista, el de Leah y el de Axel. Me ha encantado tener el punto de vista de ambos porque así vamos a poder conocerlos mucho mejor, que es lo que sienten, lo que piensan... Estructurado en un prólogo y 109 capítulos cortos que se leen muy rápido.

En cuanto a los personajes, me han encantado y sobre todo, nuestros protagonistas están muy bien perfilados ¡me han enamorado por completo!
Leah, es una chica alegre, divertida pero tras la muerte de sus padres se ha encerrado es sí misma y ha dejado de lado una de sus pasiones, pintar. Todo empezará a cambiar cuando se mude a vivir con Axel. Axel, es un chico alegre, independiente, tranquilo al que le encanta el mar y practicar surf. Vive solo en una cabaña al lado de la playa, pero un día se verá compartiendo su espacio con la hermana de su mejor amigo, Leah. Los comienzos pocas veces son fáciles y Axel hará todo lo que esté en su mano para que Leah vuelva a ser la chica alegre que era. 

La pluma de de esta autora me encanta es ágil, sencilla, adictiva y llena de sentimiento en cada página. Desde el primer capítulo logra engancharte a una historia sencilla llena de amor, amistad, familia, superación y en todo momento la autora logra transmitir cada sentimiento, cada emoción consiguiendo ponernos la piel de gallina e incluso que lleguemos a emocionarnos. 

La ambientación es espectacular y la autora lo describe todo al detalle que a mí me han dado unas ganas tremendas de coger un avión y plantarme en Byron Bay, pasear por la playa, recorrer cada rincón de la cabaña, tumbarme en la hamaca y puedo seguir, pero ya paro jaja.
Ah, y no se me puede olvidar lo importante que es la música en esta historia sobre todo, las canciones de Los Beatles.

En resumen, Todo lo que nunca fuimos es la primera parte de la bilogía "Deja que ocurra". Una historia que he disfrutado desde la primera hasta la última página y donde el sentimiento está impregnado en toda la novela.