Reseña: El chico que nunca llamó - Rosie Walsh

                                                       

Título: El chico que nunca llamó

Autor: Rosie Walsh

Editorial: Plaza & Janés

Nº de páginas: 384

Toda gran historia de amor esconde un secreto...

Sarah conoce a Eddie, se enamora perdidamente y pasan juntos siete días maravillosos. Ella está convencida de que lo que hay entre ambos es amor de verdad, nunca ha estado tan segura de algo. Así que cuando Eddie le dice que debe marcharse unos días y promete llamarla desde el aeropuerto, Sarah no duda de que lo hará.

Pero Eddie no llama ese día. No el siguiente. Ni el otro.

Los amigos le aconsejan que lo olvide como él ha hecho y que siga adelante. Sin embargo, está convencida de que ha tenido que pasarle algo que explique su desaparición.

Y cuando decide buscarlo, abre sin saberlo una puerta cerrada desde hace mucho tiempo.

En este libro conoceremos la historia de Sarah y Eddie.
Sarah es una chica que vive en Estados Unidos aunque ella realmente procede de Inglaterra. Todos los años por las mismas fechas vuelve a su país y allí será donde conozca a Eddie, ambos pasarán una semana juntos y Sarah acabará totalmente enamorada de él, tanto que ya sabe que es el hombre con el que quiere pasar su vida. Tras finalizar esa semana los caminos de ambos tendrán que separarse ya que Eddie se tiene que ir unos días, pero no sin antes prometerle que la llamará. Sarah espera día tras día esa llamada, pero nunca llega a producirse y aunque sus amigos la aconsejan que se olvide de Eddie, ella no dudará en buscarlo y saber por que ha roto su promesa.

El chico que nunca llamó es un libro narrado por Sarah y Eddie, aunque en la mayor parte del libro será Sarah quien nos cuente la historia. El libro está estructurado en tres partes con un total de 51 capítulos cortos entre los que la autora alterna el presente, la semana que pasó Sarah con Eddie y la adolescencia de Sarah. 

En cuanto a los personajes, me han gustado mucho y sobre todo, nuestros protagonistas están muy bien perfilados. Sarah, es un chica que no está pasando por su mejor momento, ya que tras 17 años de matrimonio con Reuben está en trámites de divorcio y su ánimo no es muy bueno, por ello cuando Eddie aparece en su vida volverá a ilusionarse y a estar feliz.
Eddie, es un chico tierno y agradable que trabaja como ebanista y se dedica al cuidado de su madre. Es un personaje que me ha gustado y junto con la protagonista, he pensado en mil teorías de cuál podría ser el motivo por el que no llamó a Sarah y cuando lo descubrí me sorprendió un montón.

Tengo que decir que ambos protagonistas arrastran un pasado bastante duro con el que luchan e intentan seguir adelante día tras día.

El chico que nunca llamó es un libro que me ha gustado y me ha mantenido totalmente atrapada. Nos encontramos con una historia romántica, pero también con una historia llena de misterio e intriga. Tengo que reconocer que a mí esta mezcla me ha gustado mucho, aunque lo que me ha mantenido realmente pegada al libro ha sido la desaparición de Eddie, ya que el tema del romance se toca muy de pasada. Otra cosa que me mantuvo pegada fueron algunos giros totalmente imprevisibles que vamos a encontrarnos y que nos llegarán a sorprender.

La pluma de la autora me ha gustado mucho. Ágil, sencilla y muy emotiva. Si que es cierto, que al principio la lectura se presenta un tanto lenta, pero poco a poco se vuelve mucho más ágil. La autora nos presenta un romance adulto donde el pasado de nuestros protagonistas no ha sido un caminito de flores y ambos tendrán que ir aceptandolo, empezar a perdonar y dejar a un lado los rencores.  

En resumen, El chico que nunca llamó es una novela de amor con toques de misterio e intriga, que consigue mantenernos atrapados desde la primera hasta la última página.