Entrevista a Raquel G. Osende autora del libro "La pata de oca"

 

¡¡Hoola a todo el mundoo!!

Hoy os vengo a presentar a la autora Raquel G. Osende y a su libro "La pata de oca" . 

Os invito a que cojáis un café o un té y os pongáis cómodos para conocer a la autora y a su libro.

¡Vamos allá!

-Antes de comenzar me gustaría darte la bienvenida a mi blog. Cuéntanos, ¿Quién es Raquel G. Osende?

Gracias, Fanny, ¡estoy encantada de estar aquí contigo y tus lectores! 

Pues soy una ingeniera con vocación de escritora. Quizá suene un poco raro, pero lo cierto es que las ciencias y las letras se llevan mejor de lo que parece. También soy gallega, aunque hace tiempo que no vivo allí. El trabajo me ha conducido a Madrid, Viena, Bruselas… Hace unos años tomé una de las decisiones más difíciles de mi vida: renunciar a un empleo ambicioso por volver a la España del sol, las tapas y los amigos. Ahora vivo en Valencia, ¡y no hay día que no agradezca haber priorizado la calidad de vida!

-¿Qué te hizo comenzar a escribir?

Más que lo que te hace comenzar, la pregunta interesante es qué te hace seguir. ¿Por qué seguir escribiendo cuando nadie te lee? ¿Cuando te rechazan editoriales o ni siquiera contestan? ¿Por qué seguir perdiendo el tiempo con una actividad en la que estás tan sola?

Llevo escribiendo desde muy pequeña y quisiera compartir un recuerdo contigo: el momento glorioso en que terminé mi primera «novelita». Tenía doce años. Era Nochevieja y habíamos ido a una casa rural con unos amigos de mis padres. Como no había otras niñas de mi edad, después de las uvas cogí mi libreta y me puse a escribir. Afuera nevaba, pero ni me di cuenta: había naufragado con mis protas en una isla con un tigre suelto y estaban a punto de ser rescatados, al más puro estilo Julio Verne. Puse el punto y final a las cuatro de la mañana. La satisfacción que sentí… Fue un instante de felicidad perfecta.

Creo que sigo escribiendo por buscar otros momentos como ese.

-En agosto del año pasado publicaste “La pata de oca” Cuéntanos, ¿Qué historia nos vamos a encontrar?

«La pata de oca» es la historia de dos peregrinos en el Camino de Santiago: Nacho, un padre de familia con una vida demasiado ideal para hacerle feliz, y Lorena, una joven bióloga que acaba de perder su primer trabajo. Cada uno tiene la vida que el otro anhela: Nacho añora la libertad sin ataduras de Lorena y ella envidia la familia y el hogar que él tiene. En el mes de peregrinación de Roncesvalles a Compostela, sus Caminos se entrelazarán mientras él busca un respiro y ella, una nueva vida. Y, ojo, porque el Camino no suele darte lo que pides, sino lo que necesitas… 😊

-Además, con esta novela participaste en el premio literario Amazon 2020 y quedaste finalista. ¿Qué tal la experiencia?

¡Fue una alegría enorme! Y una gran sorpresa, también: era mi primera experiencia de autopublicación y participé en el premio más que nada por «entrar en la rueda», sin expectativas de ningún tipo. Cuando me llamaron… ¡apenas me lo creía! Sin duda, ha supuesto una ayuda para dar a conocer la novela, y por eso estoy muy, muy agradecida.

-¿Cómo se te ocurrió escribir esta historia?

El Camino siempre me ha gustado. Es un viaje muy especial: ochocientos kilómetros a pie, sin prisas, con cierto «sufrimiento»… Llega a ser una experiencia más exótica y trascendente que irse a meditar a Bali. Yo había hecho tramos de la ruta varias veces, aunque nunca entero.

Un día me pregunté: «¿qué ocurriría si coincidieran en el Camino un padre de familia insatisfecho y una joven cuyo mayor deseo es tener esa familia que él desprecia?». Me pareció una cuestión interesante, así que me cargué la mochila al hombro e hice yo misma la ruta para documentarme sobre el Camino mientras buscaba la mejor respuesta. «La pata de oca» es el resultado de esa búsqueda.

-¿Qué nos puedes contar de los personajes?

Cada uno está en el Camino por sus propios motivos y eso se refleja en la evolución que experimentan. Nacho es un triunfador cuarentón, guapo, un poco egoísta; de esos hombres que, a pesar de su edad, siguen sin saber lo que quieren… Todas hemos conocido hombres así. Lorena es tímida e insegura. Tiene veinticinco años, pero la falta de raíces propias, como un novio o un trabajo estable, hace que no consiga huir del todo de una adolescencia en la que no fue muy feliz.

En la novela también nos encontraremos con personajes secundarios importantes, como Sebas, un exmilitar que guarda unos cuantos secretos; o Nerea, esquiadora profesional que tuvo que renunciar por una lesión de rodilla. También está Álvaro, director de orquesta con mucho éxito profesional y ninguno con las mujeres; o Aurora, que hace el Camino de luto, no por los diez años felices que pasó con su segundo marido, sino por los veinte que desperdició junto al primero.

Y, por último, nos encontraremos también con algún que otro personaje estrambótico (que los hay en el Camino): un caballero templario auténtico, una pareja en voto de silencio, una mujer que peregrina con su canario en la jaula…

-¿Qué fue lo más complicado de escribir de esta historia?

Quizá, montar bien la estructura de la ruta. Cada personaje sigue su propio Camino: a veces unos se adelantan, otros se quedan atrás, todos deben hacer jornadas razonables de entre veinte y treinta kilómetros al día… Tenía que tenerlos a todos muy bien controlados para que no hubiera incoherencias geográficas o temporales. ¡La de esquemas y mapas de colores que me llevó!

-Si tuvieras que definir esta historia en tres palabras ¿Cuáles serían?

Te diría «Camino de Santiago», ¡porque creo que lo resume todo! ¿Y qué es lo que resume? También en tres palabras: 

Viaje. Transformación. Autodescubrimiento.

-¿Qué le dirías a la gente para que leyera “La pata de oca”?

Es otra forma de hacer el Camino en estos tiempos de pocos viajes. Y no solo el Camino físico; también el espiritual. Tanto si ya lo has hecho y quieres revivirlo, como si nunca te lo has planteado, creo que puede ser un buen modo de descubrir paisajes maravillosos, leyendas antiguas y, sobre todo, comprobar cómo el Camino de Santiago puede ayudar en el descubrimiento de uno mismo.

-¿Hay algún mensaje que quieras trasmitir a los lectores con esta historia?

Me gusta pensar que cada lector extraerá su propio mensaje de la historia. Hay lectores que han empatizado mucho con Nacho; otros, con Lorena. A otros les ha gustado Sebas, o se sienten identificados con Nerea porque han tenido que superar alguna lesión… Cada personaje vive su propia evolución y creo que es muy bonito que el lector pueda escoger a aquél que sea más parecido a él o ella.

Lo que sí he procurado transmitir a todos por igual es la belleza de los paisajes. El norte de España es alucinante: las lomas doradas de Burgos; la piedra hecha arte en Palencia; Galicia, todo lluvia y montes viejos… ¡Hay tanto por descubrir en el Camino!

-¿Alguna manía a la hora de ponerte a escribir?

Pues me cuesta coger ritmo, por eso no me pongo si no tengo unas cuantas horas por delante para dedicarle. Ahora bien, ¡una vez que empiezo, de ahí no me saca nadie!

De todas formas, voy a tener que esforzarme por cambiar mis hábitos: estoy embarazada de siete meses ¡y dudo que con un bebé pueda dedicarle tantas horas seguidas a la escritura!

-¿Cuáles dirías que son los ingredientes necesarios para escribir una buena historia?

Yo creo que toda buena historia debe apoyarse en tres pilares: ambientación, trama y personajes.

Trama y personajes son lo que engancha, lo que hace que el lector coja el libro y no lo suelte. Y la ambientación ayuda a transportarlo a otro lugar; es lo que hace el viaje agradable.

-¿Cuál es el último libro que has leído? ¿Te ha gustado?

Yo soy mucho de releer; tanto, que esos libros no los cuento…, es casi como tener la tele de fondo. De libros nuevos, el último que leí fue «Yo antes de ti», de Jojo Moyes. Me lo habían recomendado mucho, ¡y la verdad es que lloré como una magdalena!

-¿Dónde podremos encontrar tu libro?

«La pata de oca» está disponible en Amazon, tanto en formato electrónico como en papel.

También está en Kindle Unlimited, así que los suscriptores podrán leerlo gratis.

Estoy viendo opciones para ponerlo a la venta en algunas librerías en Valencia, La Coruña y Santiago, mis tres ciudades. ¡A ver si conseguimos que salga!

-¿Algún proyecto de cara al futuro que nos quieras contar?

¡Pues en unos meses estaré lista para lanzar mi segunda novela! Esta vez, os invitaré a viajar un poquito más lejos: a Estambul, una ciudad donde dos continentes casi se juntan…, y donde las historias de amor pueden quedarse a mitad de camino.

Mientras vivía en Bruselas, tuve la oportunidad de conocer bastante bien el mundo musulmán y me llevé unas cuantas sorpresas, con similitudes que no esperaba y conflictos que jamás hubiera imaginado. Me apetecía trasladar esas impresiones tan profundas que me causó el conocer mejor el Islam en una novela. 

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                                 ¡Hasta la próxima entrada!